Vamos a darnos un nombre

Publicación

Poner nombres da placer. Es una de las etapas en los procesos de creación que despierta mayor interés y da más goce. Lamentablemente hoy día, el sentido común nos tiene atados a la necesidad de ser novedosos. Generar impacto, destacar. Pero, cuántos nombres llevan implícita de verdad la esencia de lo que llaman. Cuánta luz arrojan sobre las cosas que nombran. De cierta forma sombría, en este acto maravilloso se refleja una de las formas más mezquinas de ejercer el poder sobre lo otro. Dar nombre es un intento de generar sentido, aun donde no lo hay. Un intento de

Poner nombres da placer. Es una de las etapas en los procesos de creación que despierta mayor interés y da más goce. Lamentablemente hoy día, el sentido común nos tiene atados a la necesidad de ser novedosos. Generar impacto, destacar. Pero, cuántos nombres llevan implícita de verdad la esencia de lo que llaman. Cuánta luz arrojan sobre las cosas que nombran. De cierta forma sombría, en este acto maravilloso se refleja una de las formas más mezquinas de ejercer el poder sobre lo otro. Dar nombre es un intento de generar sentido, aun donde no lo hay. Un intento de desnudar una verdad oculta por capas y capas de interpretación.

La danza me ha honrado con la posibilidad de nombrar. Acto Feroz, La Irónica Azul, Certidumbre, Esencia Mixta, Prototipos Individuales, Fecunda Zona, Equinoccio, El Verdadero Cuerpo de Celina, Lucía Dormida, Bajo los Árboles Gigantes, Misión Frontal, Laboratorio de Movimiento Espontáneo, La Casa Grande, Cátedra Libre de Movimiento Expresivo, Caracas Roja Laboratorio. Mis hijos, mis mascotas, hasta a mis instrumentos les puse nombre. En un esfuerzo de hacerlos más míos, de ejercer pertenencia y finalmente en un despliegue de poder. Porque no los puedo dejar andar por ahí, así, in-nombrados.

¿Y en las relaciones? Entre nosotros, cuando somos con alguien en la danza o en la vida, cuando te completas con uno o con varios ¿pareja, familia, grupo, colectivo, compañía, tribu?

Tú y yo por ejemplo, ¿Qué somos? ¿Cómo nos llamamos?

Durante ya bastante tiempo la danza, mi danza, ha tratado de darse un nombre. Soy de los que creen, que tiene mucho tiempo llamándose Contemporánea más por comodidad que por otra cosa. Sé que muchos se piensan en la periferia de ese calificativo. Nos pensamos diferente y agotamos el esfuerzo forcejeando con un nombre. Al parecer falta tiempo para que nuevas formas encuentren nombres nuevos. O no. Quizá, esta incertidumbre, se concrete en una idea bastarda que pueda y quiera habitar el espacio del cuerpo con referentes propios. Con sus capacidades y necesidades de comunión de manera auténtica. Con el nombre que cada quién desee darse. Tal vez entonces, podamos dejar respirar la Danza Contemporánea con sus formas y acuerdos. Quizás, sea tiempo que al igual que el ballet, repose como una expresión que tuvo un momento, un tiempo. Que lo contemporáneo en danza, es un conjunto de formas que fueron necesarias para organizar los saberes del cuerpo en un tiempo y espacio determinado, pero que ahora nosotros podríamos darnos un nuevo nombre.

Así sencillo, una forma para que los otros nos llamen y en el que nos reconozcamos. Que no sea tan dulce como para que empalague, ni tan duro como para que espante. Lo importante es que nos lo demos nosotros. Que escapemos de esa otredad nominadora. Que evitemos la nada. Para existir sin que nos usen y desechen al antojo. Que además no nos ate ni esclavice a los depredadores, ni a los insepultos sempiternos. Eso sí, tendríamos que saber que una vez que lo tengamos, seremos clasificables. Entraremos en alguna categoría. Seremos un algo tan concreto que posiblemente quedemos estacionados en un tiempo. Seremos ubicables.

Pero ¿y si no? Si elegimos evadirnos. No de los otros que buscan ser en lo uno, como tú y yo. Sino de ser posibilidad anclada. Algo así como, no llamarnos nada. Igual seríamos referenciables, pero costaría un poco más sabernos. Conservaríamos quizá, un poco de lo que nos hizo encontrarnos y sentirnos auténticos. Podríamos dedicarnos a entendernos, más que a dominar. A completarnos. A fundirnos en el todo más que a delimitar. No llamarnos podría ser muy divertido, aunque nos deja en esa zona ininteligible sobre todo para burócratas y académicos extremos.

Pero aquí entre tú y yo, por hoy, no estaría demás hacer el ofrecimiento. A mí me gustaría proponernos que nos demos un nombre. Que nos haga uno con lo que somos, que nos sume. Que nos recuerde de dónde venimos, pero también lo que aspiramos. Que haga la danza posible en cada cuerpo, como una fiesta. Así, desvergonzados, porque si. Como quien lanza una idea al aire, pero sabe a quién se lo dice. Vamos a llamarnos como se llaman los amantes cuando pierden el control y dicen lo que no saben.

Y así desnudos, húmedos, entre cuatro rayos de sol, que la luz se resista a entrar de a poco en nuestras vidas. Rafael Nieves Caracas, 18 de julio 2016.

aliento-01Rafael Nieves

Creador venezolano. Licenciado egresado del Instituto Universitario de Teatro, en la mención de Actuación. Realizó estudios en el Instituto Superior de Danza, el Taller de Danza de Caracas y Danzahoy Escuela.

En el año 2000 funda junto a Hilse León la agrupación Caracas Roja Laboratorio, asumiendo desde entonces la dirección general, coreografía e interpretación de diversos espectáculos. Ha sido director y coreógrafo invitado de la Compañía Nacional de Teatro y Teresa Danza Contemporánea.

Residencia (2004-2005) en las ciudades de Bruselas y Ámsterdam para el proceso de creación e interpretación de la obra “TWELVE FLIES WENT OUT AT NOON”  bajo la dirección del maestro improvisador David Zambrano.

Ha ejercido la docencia en las área de Expresión Corporal, Técnica de Danza Contemporánea, Montaje e Improvisación. IUDANZA (2001-2003), IUDET(2004-2008), UNEARTE (2008-actual). Docente invitado durante un semestre en la Facultad de Arte ASAB Universidad Distrital de Bogotá (2008).

Premio Nacional de la Casa del Artista 1999, como Mejor Bailarín Contemporáneo.  Ganador del Certamen Mayor de las Artes Capitulo Danza 2005, Mejor Interpretación Grupal. Premio Municipal de Danza 2006 Caracas Roja Laboratorio, Mejor Compañía de Danza. Premio Municipal de Danza 2008, como Mejor Bailarín Contemporáneo. Premio Municipal de Danza 2014, Mejor Musicalización obra NATURAL en la cual ejecuta la bandola llanera. Premio Municipal de Danza 2015, Mejor Coreografía obra ZORRO Y MARAÑA de Caracas Roja Laboratorio.

Sobre MANGOVERDECONSAL.  Casi toda mi vida ha girado en torno a actividades prácticas. Aunque también se podría decir físicas. La Danza Contemporánea ha sido el espacio ideal para decantar mi actividad creativa total. Más me gusta pensar que la danza lo habita todo, que vivimos danzando. Porque ¿Qué somos, dónde sucedemos, si no es en el cuerpo?

Por tanto si de reflexión se trata, me es imposible empezar por otro lugar, que no sea cuerpo y que no sea yo.

Por otro lado la lectura ha sido una compañera fundamental. En principio narración, luego poesía, ensayos, artículos, crónicas. Me gusta leer gente que se hace preguntas, que busca cosas. Porque en ellas me reconozco. Y si estoy yo, está la danza, el cuerpo y la búsqueda de sentido. La cuestión es entonces ¿Cómo se escribe la danza? Esa ha sido mi pregunta favorita el último año. Me gusta pensar en una danza que se describe a sí misma, que se declama a sí misma. Descubriendo sus formas. Y como para mí la danza no es unívoca, pienso que debe contarse de manera diversa. Y leerla debe producir placeres parecidos a vivirla de cerca.

MANGOVERDECONSAL es mi forma de danzar con las palabras.

Share this

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *